Residentes con demencia de hogares especiales reciben fármacos innecesarios al final de su vida

SANTO DOMINGO/ REUTERS HEALTH - Las personas que están por morir a menudo reciben medicamentos que ya no necesitan y eso sucede incluso en hogares de cuidados especiales, según afirma un equipo.

Casi 9300 residentes con demencia de esos centros de Ontario recibieron por lo menos un fármaco con dudoso beneficio durante su último año de vida. Y casi la mitad recibió terapias innecesarias la semana en la que murió.

“Es muy importante revisar constantemente el tratamiento, determinar si los fármacos utilizados aún siguen siendo los adecuados para cada paciente y reevaluarlo si surge una nueva situación”, dijo la autora principal, doctora Paula Rochon.

Ningún especialista había evaluado a uno de cada tres residentes de las instituciones en el último año de vida, aun cuando las evaluaciones neurológicas o psiquiátricas en ese período estuvieron asociadas con una disminución del uso de medicamentos de utilidad cuestionable.

El equipo estudió a un grupo de pacientes con demencia avanzada que murieron entre el 2010 y el 2013. Los fármacos eran de utilidad dudosa si nunca se los había considerado adecuados para el tratamiento de la demencia avanzada, de acuerdo con el Formulario de Beneficios Farmacológicos de Ontario.

Los autores identificaron a 9298 personas con demencia avanzada que vivían en hogares de cuidados especiales y que habían recibido por lo menos una de aquellas terapias el año antes de morir. El 86 por ciento había recibido un medicamento de dudosa utilidad en los últimos cuatro meses de vida y en el 45 por ciento de los casos había sucedido lo mismo la última semana de vida.

Los fármacos innecesarios más utilizados fueron los que se indican para tratar la demencia y reducir el colesterol, seguidos de los anticoagulantes y las terapias hormonales.

Para Rochon, algunos de esos medicamentos podrían provocar daños en ciertos casos.

En general, de acuerdo con los autores, una gran proporción del tratamiento de los pacientes con demencia avanzada está en manos de médicos de familia.

FUENTE: Journal of the American Geriatrics Society, online 29 de marzo del 2017