¿Qué pasó en Puerto Plata?

Por Dr. Frank Espino

“Ningún hombre debería tatar de obtener beneficios a costa de la ignorancia de otra persona” Cicerón

Agradezco a muchos amigos que me llamaron para  decirme: ¿Viste lo que sucedió en puerto Plata con un supuesto “líder religioso llamado el Peregrino”…en tiempo de pandemia justo en este mes de abril 26 del 2020?

¡No pude creerlo al instante!

Violando todas las recomendaciones de salud y disposición gubernamental, un señor delgado con muestra de desnutrición, descuido de salud visible, incluyendo su vestimenta hasta su anatomía, cargando a hombros una cruz; tenía a todo un pueblo en hipnosis colectiva, vociferando y pidiendo junto él que el coronavirus 19, había llegado a su fin en la República Dominicana y esa cruz la iba llevar hasta el Océano Atlántico, frente a Puerto Plata.

En realidad cuando vi las imágenes pensé que como hay tantos “memes” en las redes sociales, era producto de un chiste, producto de la crisis que estamos viviendo con una cuarentena, ¡insoportable! Pero, ¡no!

Estaba seguido por  gentes de todas la clases sociales: trabajadores humildes, profesionales, amas de casa, mujeres, hombres, niños, jóvenes, ancianos, religiosos, y como nunca faltan, los políticos sacando ventaja de en todas ocasiones.

Hurgando en la historia podemos hacer un paralelismo: En 430 A.C., la ciudad de Atenas fue azotada por una afección desconocida que causó pánico, desesperación, provocó la muerte de un tercio de la población y evaporó la fe en las instituciones y en los valores sagrados. Cito: “Según Tucídides, "la catástrofe fue tan arrolladora que los hombres, sin saber lo que sucedería con ellos, se volvieron indiferentes a los mandatos de la religión y de la ley". (¿Se nos parece?)

Josiah Ober y Federica Carugati en un estudio   publicado por la Universidad de Stanford, citan: "La democracia demostró ser más fuerte que la enfermedad. En vez de derrumbarse, su sistema evolucionó y se fortaleció"

En tiempos tan modernos en boca de una líder mundial, de un país súper desarrollado, tenemos que realizar una reflexión: Cito: “Somos una democracia. No logramos cosas por la fuerza, sino a través del conocimiento compartido y la cooperación", (canciller Ángela Merkel) al anunciar la necesidad de confinamiento.

El historiador británico Peter Frankopan en su libro "Las Rutas de la Seda". Hace referencia a la Peste negra: “Fue algo totalmente diferente que penetró en la circulación del planeta conocido hasta entonces. Con un impacto mucho más decisivo: la enfermedad".

Qué podría suceder, veamos: “La Gripe Española (que dicho sea de paso no se inició en España) la gente desesperada en Filadelfia, Pensilvania prematuramente terminó su cuarentena y lanzó una manifestación en contra de la medida de permanencia en casa.  Veamos: 200,000 personas desfilaron por las calles en los últimos días de septiembre del 1918”. ¿Qué sucedió? (Lo que podría suceder en Puerto Plata.) 72 horas después todas las camas de los 31 hospitales en Filadelfia  estaban ocupadas. 4,500 personas murieron en lapso de pocos días.”

El análisis de esa muchedumbre de seguidores de un “peregrino con una cruz” flanqueada por autoridades policiales, la sindicatura, iglesias,  bomberos ambulancias, creyentes y no creyentes, en un ambiente propio de un carnaval, ¿Quién fue el organizador u organizadores? ¿A quién favorecía esta parafernalia ? ¿Por qué no se evitó? ¿Quién lo consintió? Y lo más curioso, ¿Cuál fue el sistema de invitación masiva utilizada, que ha dejado a los grandes estrategas de la promoción boca abierta?

Al final de cuentas: todo el mundo se pregunta: ¿Qué pasó en Puerto Plata?

El autor es médico, escritor  y profesor universitario