A mayor riesgo genético de obesidad, mayor efecto de una dieta saludable en el peso

Por Lisa Rapaport

NUEVA YORK, EE.UU./ REUTERS HEALTH -Las personas que adoptan una alimentación saludable para adelgazar obtendrían mejores resultados cuando tienen un mayor riesgo genético de obesidad, según sugiere un estudio realizado en Estados Unidos.

"Las personas con alto riesgo genético tienen alto riesgo de ser obesas; sin embargo, nuestros datos indican que los genes no marcan el destino", dijo Lu Qi, de la Facultad de Salud Pública y Medicina Tropical de Tulane University, Nueva Orleans. "La alimentación saludable previene el sobrepeso y eso es más evidente en aquellos con alto riesgo genético", agregó.

El equipo de Qi calificó la dieta de los participantes del estudio, asignando más puntaje cuanto mayor era el consumo de alimentos que reducen el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como las frutas, las verduras, los granos integrales, los frutos secos, las legumbres, y menor era el consumo de carnes procesadas y de dulces.

Para evaluar el riesgo genético, el equipo se concentró en 77 variaciones pequeñas del ADN que están asociadas con la obesidad en descendientes de europeos. Las personas reciben una copia de los genes de cada padre y el equipo calificó el riesgo genético de 0 a 154 puntos de acuerdo con la cantidad total de las versiones de los genes asociadas con la obesidad, conocidas como alelos, que los participantes podían heredar.

Todos los participantes del estudio trabajaban en cuidado de la salud. Fueron 8.828 enfermeras y 5.218 profesionales masculinos de la salud. Ellas tenían un riesgo genético de obesidad promedio de 69,5 y ellos, de 69,3. Los participantes engordaban 0,05 kilogramos cada cuatro años por cada 10 puntos más de riesgo genético.

Pero en 20 años, la calidad de la dieta influyó fuertemente en la relación entre el aumento de peso y el riesgo de obesidad genética. Cada cuatro años, el aumento de la calidad alimentaria estaba asociado con 0,35 y 0,5 kg menos de peso, respectivamente, en los participantes con el riesgo genético más bajo y más alto, según publican los autores en BMJ.

Aun así, podría ser que ciertos alimentos alteren la actividad de los genes asociados con la obesidad, como indicó el doctor Ramón Estruch, del Instituto de Salud Carlos III de Madrid, España.

La gente con alto riesgo de obesidad podría, por ejemplo, perder más peso o evitar ganarlo si llevara dietas ricas en frutas, vegetales, pescado y otros alimentos ricos en omega-3, dijo Estruch a través de un correo electrónico. "Estas recomendaciones funcionan para todas las personas, pero especialmente para aquellos con una predisposición genética a sufrir sobrepeso u obesidad", agregó Estruch.

FUENTE: The BMJ, online 10 de enero del 2018