Por Dr. Jean Ariza.
Médico Ginecobstetra
Por fin llegó el gran día y estás lista para ir al hospital. Con los nervios de última hora, podrías olvidar algunas cosas que te harían la estancia más fácil y agradable. Es buena idea preparar tu maleta cuando tengas 8 meses de embarazo, en caso de que des a luz un poco antes de la fecha prevista.
Puedes empacar dos maletas: una para lo que necesitarás durante el parto, y otra para lo que necesitarás después. Aquí tienes unas ideas de lo que debes empacar.
Para el parto:
Tu documento de identidad, carnet del seguro y todos los papeles del hospital que necesites, tus lentes, incluso si usas lentes de contacto, es posible que prefieras usar los lentes en algún momento durante tu estancia en el hospital.
Artículos de aseo personal:
Empaca algunos objetos de uso personal como cepillo y pasta de dientes, cepillo de pelo, cintas para el pelo, jabón, una bata, un camisón o dos, pantuflas y medias (calcetines).
Elige algo suelto y cómodo, y que no te importe si se mancha. Un camisón con mangas cortas es ideal para que te puedan tomar la presión arterial fácilmente. También puedes llevar tus propias pantuflas y bata para caminar durante las primeras etapas del parto.
Cualquier cosa que te pueda ayudar a relajarte.
Aquí tienes algunas ideas: tu propia almohada (usa una funda estampada o de colores vivos para que no se confunda con las del hospital), música en tu teléfono móvil, algo entretenido para ti.
Después del parto:
Un camisón limpio, Si vas a dar el pecho, es mejor elegir un modelo que sirva para amamantar (que se abra por delante).
Una lista de los números de teléfono de tus seres queridos, tu teléfono celular y tu cargador o, si vas a usar el teléfono del hospital, una tarjeta de teléfono pre pagada.
¡Después de que el bebé nazca, querrás llamar a familiares y amigos para darles la buena noticia! Es importante llevar una lista de nombres y teléfonos o asegurarte de tenerlos programados en tu celular, porque quizás con la emoción se te borren de la memoria.
Un brasier para amamantar o un brasier normal que sea bien cómodo.
Tanto si decides amamantar como si no, tus senos probablemente estarán hinchados y adoloridos cuando te baje la leche. Esto puede suceder en cualquier momento durante los primeros días después del parto. Una vez te baje la leche, las almohadillas protectoras para los senos pueden ser útiles para absorber la leche que pueda salirse y proteger tu ropa.
Ropa interior de maternidad, puedes llevarte algunas cómodas, grandes y de algodón, que no te importe si se manchan.
Tus toallas higiénicas favorita, después del parto sangrarás bastante, llévate unas cuantas para sentirte lo más cómoda posible. Asegúrate de que sean muy absorbentes y de tener bastantes en casa para cuando regreses.
Un libro sobre el cuidado del recién nacido.
Una libreta, diario y lapicero.
Escribe preguntas que quieras hacerle a la enfermera, los horarios de alimentación de tu bebé, lo que te diga el pediatra, o los recuerdos del primer día de vida de tu bebé. Algunos padres se llevan el Libro de Recuerdos del Bebé (Baby Book), para anotar los detalles del nacimiento de inmediato.
Una muda de ropa para volver a casa.
Aunque resulte difícil de creer, probablemente todavía te veas como de 5 ó 6 meses de embarazo, así que lleva ropa holgada y un par de zapatos cómodos.
Para tu bebé
Una muda de ropa para volver a casa.
Los pijamas o mamelucos de una pieza son abrigados y fáciles de poner. Si le pones otro tipo de ropa, lleva medias o zapatitos blandos para sus pies. Lleva también un gorrito para cubrirle la cabeza si hace fresco. Las piernas de su atuendo deben ir separadas para poder pasar la correo del asiento del auto (es decir, no te lleves un pijamita-manta que es como una bolsa entera).
Una mantita, es buena idea llevarte una para taparlo cuando lo pongas en el asiento del coche. Si hace frío llévate una manta más gruesa.
Cortaúñas para bebés o lima de esmeril, aunque es posible que te dé pánico cortar esas diminutas uñitas, los bebés no controlan muy bien sus movimientos y es fácil que se rasguñen la cara. También puedes usar unos guantes para bebé en esos días hasta que el pediatra te ayude a cortarlas, si te da miedo hacerlo, pero no se las cortes con los dientes porque podrías hacerle daño (la creencia de que se quedarán ciegos si las cortas con tijeras es sólo uno de los muchos mitos que hay en nuestra cultura).
Artículos de aseo personal: jabón, pañales etapa recién nacido, pañitos de aseo.
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