No permitas que el Bullying cambie tu esencia

SANTO DOMINGO / DIARIO DE SALUD.-- El acoso escolar (también conocido como bullying) se define como cualquier forma de maltrato psicológico, verbal o físico producido entre escolares de forma periódica a lo largo de un tiempo.

Estadísticamente, el tipo de violencia dominante es el emocional y por lo general se da en el aula y patio de los centros escolares. Los protagonistas de los casos de acoso suelen ser los niños y niñas en el proceso de entrada a la adolescencia, siendo ligeramente mayor el porcentaje de niñas en el perfil de víctimas.

Y es de aquí que la marca de toallas Nosotras como parte de su Responsabilidad Social con la educación de las niñas y adolescentes de la República Dominicana, da inicio a su campaña “Bullying por Loving” enmarcada en generar seguridad, confianza y autoestima en todas las niñas y adolescentes del país.

Elaine Feliz, educadora sexual y vocera oficial de la campaña “Bullying por Loving” de Nosotras, nos habla sobre la problemática del acoso y sus consecuencias.

“El acoso escolar no es nuevo, siempre ha existido”, sin embargo Feliz explica que se han hecho investigaciones que arrojan como resultado, que los últimos años el acoso es más grave y afecta más a las víctimas que hace años atrás.

“El problema mayor del acoso actual es que puede pasar las 24 horas del día, los 7 días de la semana, y llegar incluso a un niño, niña o adolescente cuando él o ella están solos, y esto sucede gracias a que las tecnologías de la comunicación lo han facilitado”, profundizó.

Por lo general las víctimas de acoso en las redes sociales, o a través del celular, también son víctimas en la escuela y se les hace más difícil escapar de la conducta porque los mensajes y las imágenes pueden ser publicados anónimamente y distribuidos rápidamente a un público muy amplio, agregó Feliz.

“Y el problema emana del uso de la tecnología; los padres les están comprando aparatos a muy temprana edad, a una edad en las que ellos no pueden manejarse ni enfrentarse con madurez ante este tipo de situación”, agregó.

“Otro punto importante es la autoestima. La forma en la que un niño se acepta. Y es que muchos de ellos sienten rechazo hasta de sus padres, no son queridos como son y cuando salgan a las calles y se les llame ‘gordo o cuatro ojo’ se les estará lastimando una herida que ya sus padres y/o familiares han abierto”, enfatizó Feliz.

La educadora también dijo que está demostrado que los niños con baja autoestima son más propenso a ser un acosador que una víctima. Lo que significa que tanto uno como el otro presenta autoestima baja o inflada, enmarcando esta última a una persona que se siente superior a los demás pero que, en el fondo, siente un vacío inmenso.

Cambios que presenta la adolescencia

Siempre digo que la adolescencia es la etapa más chula y a la vez la más corta e intensa. Durante este periodo la producción hormonal es inmensa y se asemeja a la de una mujer embarazada. Lo que significa que la cantidad de hormonas que esa niña o niño está recibiendo genera cambios físicos y psicológicos, y cuando esto está sucediendo la autoestima baja por naturaleza.

Por ejemplo, en el caso de las niñas que al pararse frente a un espejo ven que tienen senos, que en sus exilas está creciendo vello y que de repente tiene rostro lleno de espinilla, es muy difícil para ellas. De manera que tanto mamá como papá deben dar afecto y apoyo emocional a estas niñas para que ese bajón de autoestima no la conduzca a un acosador o víctima.

El acosador y sus antecedentes familiares

“Casi siempre estos niños tienen una familia disfuncional. Una familia que también los agrede, que les exige calificaciones alta cuando ellos no las pueden sacar, que no les pone reglas, que les tiene una tarjeta para comprar lo que les parezca, precisamente este escenario crea a un acosador porque él está queriendo llamar la atención para decir toda la ira que tiene interna, es decir que el comportamiento de los adolescentes siempre trata de decirnos algo”.

“Y es aquí donde estamos nosotros porque ninguna víctima tiene las herramientas para salir solo de ese acoso. Sin embargo, el acosador necesita a alguien que lo pare, que tenga mayor autoridad, jerarquía y casi siempre el acosador tiene un séquito, tiene un grupo, y cuando éste se hace en grupo tiene mayor problema”.

¿Cuándo se determina que el niño está enfrentado acoso?

Hay que hacer una diferencia entre acoso y violencia. Para que el acoso se considere como tal debe darse de manera repetida, lo que significa que si un día a un niño le pegan un chicle en su silla no le están acosando, solo ha sufrido una acción violenta.

Cabe destacar que para que un evento reciba el nombre bullyng se debe dar entre niños de la misma edad o con una diferencia de dos a tres años.

¿Detrás de qué va un acosador?

El acosador siempre busca una víctima que tenga una diferencia resaltable, que bien puede ser el niño que saque las mejores notas en la escuela, o la niña pelo riso, igual puede ser porque la tez de su piel es más oscura, chicos que tienen una etiqueta y que ellos toman como excusa perfecta para agredir.

Consejo para prevenir y enfrentar el bullying

Es importante que los padres presten atención a sus hijos; cuando un niño muestra diferencias en su comportamiento algo pasa y eso se debe investigar con tiempo porque el acoso es un mal que impacta la salud física y emocional del niño que es capaz hasta de conducirlo al suicidio.

De igual forma, para prevenir y enfrentar los casos de bullying, tanto las familias como en los centros escolares, deben trabajar en conjunto para subir la autoestima de los niños, niñas y adolescentes porque los chicos y chicas con baja autoestima (independientemente de su edad) son más vulnerables a ser víctimas de acoso y a convertirse en acosadores. 

Toda la comunidad escolar es responsable para atender y frenar el acoso escolar, y los padres son fundamentales para identificarlo y ayudar a sus hijos a superarlo.

¿Dónde hay mas bullying, en escuelas públicas o privadas?

Este tipo de acoso es visto con más frecuencia en los centros privados por el nivel de competitividad adquisitiva.

Tipo de Bullying

Físico: empujones, patadas, agresiones con objetos, etc. Se da con más frecuencia en primaria que en secundaria.

Verbal: insultos y motes, menosprecios en público, resaltar defectos físicos, etc. Es el más habitual.

Psicológico: minan la autoestima del individuo y fomentan su sensación de temor.

Social: pretende aislar al joven del resto del grupo y compañeros.