El Instituto Nacional del Cáncer de EE. UU. describe la circulación sanguínea como aquella en la que hay un óptimo flujo de sangre, misma que es la responsable de transportar nutrientes, oxígeno y otras sustancias “importantes desde el corazón, a través de los vasos sanguíneos, al resto de las células, tejidos y órganos del cuerpo”.
Por tanto, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (Medline Plus) explica que el sistema circulatorio también se denomina vascular, que comprende los vasos sanguíneos, las arterias, las venas y los capilares.
Por esto, la lista es amplia de las enfermedades que lo afectan, que, tal y como lo asevera la enciclopedia médica, “son comunes y pueden ser graves” como:
De ahí que, en un artículo publicado por Mejor con Salud, se asegure que el romero mejora la circulación sanguínea, favoreciendo así las piernas.
Romero
Tal y como lo señala el portal Tua Saúde, el romero es una planta que tiene un efecto tónico, diurético, cicatrizante, antimicrobiano y estimulante, que contribuye en las funciones del sistema digestivo.
El romero es una especie vegetal que se utiliza desde hace muchos siglos en la medicina tradicional.
Su efecto antioxidante es eficaz en la protección del sistema inmunológico. Así mismo, mejora el aspecto de la piel.
Una publicación revisada por la nutricionista Tatiana Zanin, menciona las propiedades del romero en las que se encuentran las analgésicas y las antiinflamatorias, que usualmente son aprovechadas para combatir las varices.
Más, sin embargo, Cuerpomente menciona algunas contraindicaciones que tiene el uso de esta planta silvestre con propiedades aromáticas. Por ejemplo:
Alimentos recomendados
Y aunque es importante consultar con un profesional de la salud, para descartar posibles complicaciones circulatorias, la organización AARP asegura que el consumo de estos alimentos mejora la circulación, como por ejemplo, el chile, que procura el bienestar de los vasos sanguíneos.
Lo mismo ocurre con el jengibre, que tras su ingesta estimula circulación acompañado del ajo que ―según la entidad― evita la formación de coágulos sanguíneos.
Los tomates también se destacan porque están compuestos de antioxidantes como el licopeno, ayuda a una mejor circulación de la sangre, reduciendo así el riesgo de problemas cardíacos.
Las nueces son otra opción. Estos frutos secos aportan ácido omega-3, que es un gran aliado del sistema circulatorio. Según el portal Saber Vivir, este nutriente protege los vasos sanguíneos, es antiinflamatorio y anticoagulante (ayuda a diluir la sangre), y como si fuera poco reduce la presión arterial y el colesterol malo. Estos componentes también se encuentran en alimentos como el pescado azul.
De otra parte, los alimentos de color azulado, como los higos y las ciruelas son favorables, gracias a que son ricos en antocianinas. Estos pigmentos hidrosolubles tienen un fuerte poder antiinflamatorio que ayuda a reducir el tamaño de estas venas inflamadas, asegura una publicación del portal Alimente, del diario El Confidencial, de España.
La ciruela es un alimento con vitaminas y minerales buenos para los huesos.
Así mismo, los flavonoides presentes en alimentos como las cebollas, frambuesas, arándanos y otras bayas, ayudan a proteger las paredes de las venas y mejoran la circulación periférica. Además, protegen y fortalecen los vasos sanguíneos facilitando la circulación de la sangre.
Un alimentos más que es recomendado para mejorar la circulación es el aguacate. Esta fruta es rica en vitamina E, que se considera un anticoagulante natural que ayuda a diluir la sangre y, por tanto, facilita su paso a través de los vasos sanguíneos, precisa Saber Vivir.
Al respecto, la Biblioteca Nacional de Medicina asegura que es un nutriente que previene la formación de coágulos sanguíneos. El aguacate es rico en grasas saludables por lo que evita, por ejemplo, la formación de placas.
El consumo de aguacate le aporta grasas saludables al organismo.
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