Anosmia y ageusia-fisiopatología

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RD/DIARIO DE SALUD.- El olfato, considerado el más primitivo de los sentidos, tiene la capacidad de relacionar, prevenir, recordar y generar distintos tipos de sensaciones. Un olor se define como una impresión especial percibida a través del sentido del olfato, que deriva de la acción de algunas sustancias químicas sobre el sistema olfatorio, situado en la nariz.


El gusto es uno de los sentidos mediante el cual se perciben y se reconocen los diferentes sabores. Su función reside en unos receptores sensoriales externos llamadas papilas gustativas que se encuentran en la lengua.


En síntesis, lo que se altera es el receptor de las células olfatorias y de esa manera no se “lleva” el estímulo -que son las partículas odoríferas- para que el cerebro pueda interpretar los olores. Y de esta manera se altera también el sabor, que da lugar a la ageusia, que es la falta de gusto, que se manifiesta porque se alteran los receptores que están en las papilas gustativas encargadas de detectar el dulce, salado, ácido y amargo.


Estos receptores están distribuidos en distintas partes de la lengua: el dulce está en la punta, el salado en los costados laterales anteriores, el ácido en los laterales posteriores y el amargo atrás.


En el centro de la lengua se capta el umami, o también llamado el quinto sabor. Entonces,  anosmia y ageusia son dos síntomas que no deben dejar de ser tenidos en cuenta. HOY

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