Revolucionando la radioterapia

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En el Centro David H. Koch de NYP, un acelerador lineal guiado por resonancia magnética promete a los pacientes con cáncer tratamientos más específicos.


Para la Dra. Silvia Formenti, el aspecto más emocionante del Centro David H. Koch del NewYork-Presbyterian es un acelerador lineal con imágenes de resonancia magnética (MRI) integradas, el MRIdian de ViewRay.


La resonancia magnética permite la orientación más precisa de la radiación al rastrear con precisión la posición y la forma del tumor de un paciente. Cuando los órganos internos se mueven en respuesta al movimiento respiratorio y cardíaco, esta máquina dirige el tratamiento para que responda con precisión al cambio de posición del tumor. El resultado son campos de radiación más pequeños y precisos, que respetan el tejido normal adyacente. Lo mejor de todo para los pacientes es que los cursos de tratamiento pueden ser más cortos y precisos.


La primera en la costa este, esta máquina de última generación ofrece "la radioterapia de fotones clásica, pero en el contexto de la resonancia magnética", dice el Dr. Formenti, presidente de Sandra y Edward Meyer para la investigación del cáncer, profesor y presidente de oncología radioterápica y oncólogo radioterápico en jefe del NewYork-Presbyterian / Weill Cornell Medical Center, y miembro del comité de planificación del Centro David H. Koch del NYP.


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Dra. Silvia Formenti


 “La imagen por resonancia magnética permite mucha más precisión en la definición de los órganos dentro del cuerpo y con mucha más claridad. Además, [ofrece] cierta información funcional que no obtendría con una tomografía computarizada normal y una máquina de radiación normal. Estas características únicas permiten la administración segura de dosis de radiación más grandes y dirigidas con mayor precisión, lo que reduce la cantidad de visitas necesarias para extirpar un cáncer ".


Aproximadamente dos tercios de los pacientes con cáncer que reciben tratamiento se someten a una forma de radioterapia. Pero durante una sesión típica, los tumores y los órganos internos del paciente se mueven como resultado de la respiración o los latidos del corazón. Eso significa que, aunque un radiólogo coloca al paciente correctamente al comienzo y al final de la sesión, es posible que el haz de radiación no se dirija al tumor con la precisión esperada durante todo el tratamiento.


"El paciente se convierte en socio y está en el asiento del conductor". Dra. Silvia Formenti


Con la tecnología estándar disponible, podemos confirmar que el paciente está en la posición correcta y verificar que el órgano y el tumor estén en la posición correcta antes o después de la radiación, pero no en tiempo real”, dice el Dr. Formenti. El nuevo acelerador lineal mejora esto al depender de las imágenes de resonancia magnética para informar la administración de la dosis solo cuando el tumor está exactamente en la posición en la que debe dirigirse el haz de radiación. Por lo tanto, los tejidos sanos que rodean el tumor se conservan en gran medida.


Es más, de acuerdo con el espíritu del paciente primero del NewYork-Presbyterian David H. Koch Center, "estamos trabajando muy de cerca con la compañía que desarrolló esta máquina para tratar de darle al paciente el control de su movimiento", dice el Dr. Formenti. “El paciente podrá ver en la pantalla ... el movimiento interno del cuerpo y aprender a modificar la respiración para ajustar y alinear el objetivo con el haz de radiación. El paciente se convierte en socio y está en el asiento del conductor. Además de mejorar la precisión y la eficiencia del tratamiento, creo que también será psicológicamente útil devolver parte de ese control a los pacientes con cáncer, que a menudo se sienten excluidos del tratamiento de su enfermedad ".

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Para más información, favor contactar a la Sra. Nancy Velazquez, Embajadora de New York Presbyterian Hospital para la Republica Dominicana. Nav9013@nyp.org, 829-764-1160



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