El ejercicio puede ayudar al corazón de las personas sedentarias de mediana edad

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Ejercicio mujeres


Por Lisa Rapaport



NUEVA YORK, EE.UU./ REUTERS HEALTH - Los adultos sedentarios de mediana edad que empiezan un entrenamiento físico intenso podrían prevenir o reducir la rigidez cardíaca que puede inducir la insuficiencia cardíaca, de acuerdo con un experimento.


Al azar, 61 adultos sedentarios de 54 años, en promedio, participaron de un programa de ejercicio durante dos años o de un grupo control que hizo actividades físicas no tan intensas. El entrenamiento incluyó ejercicios de intensidad moderada a alta por lo menos cuatro veces por semana, mientras que el grupo control levantó pesas, hizo ejercicios de equilibrio o yoga tres veces por semana.


En Circulation, los autores publican que, en dos años, el ejercicio moderado a intenso proporcionó una mayor mejoría en la capacidad de usar el oxígeno y redujo la rigidez cardíaca con respecto del ejercicio no tan intenso.


"Lo que este estudio demuestra, y que no se conocía, es que el entrenamiento en la dosis adecuada (4-5 veces por semana, incluidos los ejercicios de alta intensidad) en el momento adecuado (por lo menos a mediana edad) revierte la atrofia cardíaca que ocurre con el envejecimiento", dijo el autor principal, doctor Benjamin Levine, del Centro Médico Southwestern de University of Texas, Dallas.


"Esa recuperación estructural es clave para preservar la vitalidad durante el envejecimiento y prevenir las cardiopatías de la edad, como la insuficiencia cardíaca", agregó.


Al comenzar el estudio, los participantes eran sedentarios, pero sin enfermedades. El grupo que entrenó participó de un programa supervisado: hizo series de ejercicios con intervalos de cuatro ciclos de actividad intensa al 95 por ciento de la frecuencia cardíaca máxima durante cuatro minutos y una recuperación al 60-75 por ciento de la frecuencia cardíaca pico durante tres minutos.


La frecuencia cardíaca máxima equivale a 220 menos la edad en años. La frecuencia máxima para una persona de 55 años es 165 latidos por minutos (lpm) y el 95 por ciento de eso es 157 lpm (más información de la Asociación Estadounidense del Corazón en http://bit.ly/2n7Ayu0).


Al final del estudio, el grupo entrenado mejoró un 18 por ciento la cantidad máxima de oxígeno utilizado durante el ejercicio, sin cambios en el grupo control. La rigidez cardíaca también mejoró en el primer grupo, pero no en el segundo.



FUENTE: Circulation, online 8 de enero del 2018

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