Odontóloga explica qué es el dolor orofacial y habla sobre la calidad del sueño

SANTO DOMINGO, RD/ DIARIO DE SALUD.- La odontóloga Anelisse Pérez explicó que dormir tiene mucho que ver con la boca, puesto que la forma del desarrollo de esta, incide en la forma de nuestra vía aérea superior, ‘‘el techo de la boca es el piso de nuestra nariz’’ expuso la especialista, advirtiendo que esta relación anatómica, es vital para el buen funcionamiento de ambas partes del cuerpo.

Según Pérez, cuando hay una afección en algún sistema de la nariz, boca, garganta o el oído se combina y puede hacernos sentir dolor y confusión por no saber que causa realmente el problema, por eso esta afección es llamada dolor orofacial.

Roncar no es señal de buena calidad del sueño

Sentir una presión en la mandíbula después de dormir puede ser síntoma de un apretamiento dental o una mala calidad del sueño. Esto puede darse por el agotamiento, pero si el sueño no es reparador, el cansancio se va acumulando y no hacemos un sueño profundo.

La profesional de la salud constató también que roncar al dormir significa que la calidad del sueño no es buena, contrario a lo que se cree.

‘‘Esa pesadez en la mandíbula, esa presión en los dientes, ese ronquido, ese dolor en la nuca que va y viene son signos de dolor orofacial que pueden estar vinculados con una falta de permeabilidad de la vía aérea a través de los dientes o la musculatura’’ explicó.

Lo que sucede al roncar es que la mandíbula se desplaza hacia atrás porque el espacio donde el aire debe pasar se bloquea.

Para estas situaciones hay unos dispositivos para usar al dormir que mantienen la mandíbula en su posición. También sucede porque la persona en su fase de crecimiento no tiene una mandíbula completamente desarrollada o en la etapa adulta por un bloqueo.

Estableció que puede ser anatómico o por naturaleza que tengamos una mandíbula pequeña y se tenga que intervenir con una cirugía o en caso de ser una mala posición usar un dispositivo regulador.

Agregó que es mucho más positivo si se detecta a temprana edad porque se puede corregir con intervenciones ortopédicas. De igual forma, puso la misma importancia en la etapa adulta de tener una buena mordida y cuidar de que no perdamos ningún diente porque los dientes que quedan en la boca irían cambiando la forma de la boca y dañando la articulación de la mandíbula.