La toxina botulínica es útil en Dermatología pediátrica

MADRID, ESPAÑA/ DIARIO DE SALUD.— La toxina botulínica es una de las terapias estrella en Dermatología Estética y que, sin embargo, no deja de mostrar su utilidad en la reducción de síntomas de múltiples patologías, incluidas algunas pediátricas. Así se ha constatado los días 25 y 26 de enero durante la XXX Reunión del Grupo Español de Dermatología Pediátricade la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) que se ha celebrado este año en Bilbao.

Uno de los casos es el de paquioniquia congénita es una genodermatosis rara que suele generar engrosamiento de la uña, quistes e hiperqueratosis de las plantas de los pies (callosidades) y que provoca, entre otros síntomas,dolor en muchos pacientes. Los tratamientos que se utilizan actualmente no son curativos, sino que se centran en el cuidado de las uñas y la eliminación o reducción de dolor.

Otra patología dermatológica que puede verse beneficiada del empleo de esta sustancia es la hiperhidrosis palmar y plantar, es decir, el exceso de sudoración.“Hay chavales que no quieren dar la mano oque mojan el papel durante los exámenes. La hiperhidrosis no es un sudor por eliminación de calor, sino que es una reacción primitiva del sistema simpático. Con la toxina botulínica se paraliza la inervación simpática y se elimina la sudoración en esazona”, explica la Eulalia Baselga, jefa de Dermatología Pediátrica del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona.

Fenómeno de Raynaud

Otra aplicación de la toxina botulínica que se ha presentado en la XXX Reunión del GEDP en Bilbao es la del tratamiento del fenómeno de Raynaud, una alteración vascular que cursa conuna respuesta anómala a las bajas temperaturas eisquemia en los dedos de las manos y los pies. “Presentaremos una serie de ocho pacientes a los que la inyección de toxina botulínica ha reducido su dolor y mejorado su calidad de vida”, explica Raúl de Lucas, jefe del Servicio de Dermatología Pediátrica del Hospital Universitario La Paz de Madrid.

Este especialista señala que esta terapia como otras que se aplican en Pediatría son el resultado del papel que debe cumplir el médico con el paciente. “Tenemos casos que, aunque están diagnosticados y tienen un tratamiento, no mejoran o no van tan bien como deberían. Nuestro papel es acompañar al paciente en el tiempo, porque tras un diagnóstico no termina nuestro trabajo. Por este motivo, cuando vemos pacientes que siguen con síntomas que deterioran su vida, buscamos alternativas terapéuticas para aliviar esos problemasy mejorar su calidad de vida”.

En esta reunión también han presentado datos que apoyan la necesidad de iniciar precozmente el tratamiento de hemangiomas con propanolol para lograr resultados óptimos y reducir las secuelas estéticas.