Por Carolyn Crist
NUEVA YORK,EE.UU./ REUTERS HEALTH.--Las personas con piel clara sensibles al sol deberían adoptar varias conductas para evitar quemaduras, de acuerdo con un nuevo estudio.
Las personas que sólo usaban pantalla solar tenían más chances de presentar quemaduras que las que también empleaban sombrero y prendas de protección y se sentaban en la sombra.
Para prevenir el cáncer de piel, hay que comprender cómo las conductas protectoras previenen las quemaduras, según dijo la autora Kasey Morris, del Instituto Nacional del Cáncer, Bethesda.
El cáncer de piel afecta a millones de estadounidenses y se estima que el cáncer melanoma y no melanoma cuesta más de 8.000 millones de dólares por año. Una de cada cinco personas desarrollará cáncer de piel y, en el 2018, a 100.000 estadounidenses les diagnosticarán melanoma maligno, que es la forma más peligrosa.
"La mayoría de esos casos se producen por la exposición excesiva a la radiación UV y podría evitarse con conductas que protegen del sol", agregó Morris.
Morris y su colega Frank Perna analizaron más de 28.000 respuestas de la Encuesta Nacional de Salud del 2015 sobre qué le sucedería a su piel si permanecieran al sol durante una hora varios meses después de no estar expuestos.
El equipo consideró sensibles al sol a los que habían respondido que "tendrían una quemadura grave con ampollas", "tendrían una quemadura moderada con caída de piel" o "tendrían una quemadura leve con poco bronceado". No eran sensibles al sol los que habían dicho que "se bronceaban sin quemarse" o "no pasaría nada".
El 77 por ciento usaba por lo menos una forma de protección solar. Buscar la sombra era lo más común (40 por ciento). Usar prendas con manga larga era la menos común (16 por ciento).
En los casi 16.000 participantes sensibles al sol, los que sólo usaban pantalla solar registraban la tasa más alta de quemaduras (62 por ciento). Aquellos sensibles al sol con las chances más bajas de sufrir una quemadura no usaban pantalla solar, pero buscaban la sombra, usaban sombrero y prendas que protegían la piel.
En los 12.000 participantes que no eran sensibles al sol, aquellos con cuatro conductas de protección tenían la posibilidad más baja de sufrir quemaduras (7 por ciento).
FUENTE: JAMA Dermatology, online 27 de junio del 2018
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