Neumólogo Plutarco Arias analiza el tabaquismo y su consecuencia a nivel respiratorio

SANTIAGO,RD/ DIARIO DE SALUD.-El principal principio activo del tabaco es la nicotina, tanto por su comercialización y consumo, el cual está considerado como una de las drogas para generar mayor capacidad de adicción.

  
“Si la comparamos con las demás sustancias psicoactivas, es de fácil obtención, bajo costo y rápida acción cerebral, que se produce en pocos segundos, alrededor de diez segundos, luego que el fumador realice la acción”, expresó el doctor Plutarco Arias, neumólogo de la clínica Unión Médica.
  
El especialista dijo que se han identificado más de 6 mil 500 componentes en el humo del tabaco, farmacológicamente activo, tóxicos y con actividad para producir cáncer.
  
“El tabaquismo es considerado como una enfermedad por la Organización Mundial de la Salud, y se considera como una de las primeras causas evitables de muerte en Europa”, precisó.
    
Arias destacó que hay otros conceptos que se definen como tabaquismo pasivo, que es la exposición de personas al producto del humo, en lugares cerrados, llamados fumadores de segunda mano y un tercer grupo que es los residuos de olores y sustancias que quedan expelidas en lugares cerrados.
   
Explicó que estas quedan donde ha habido fumadores, sustancias que se quedan adheridas a las paredes, vestidos, baños y estos son los llamados fumadores de tercera mano.
   
Indica que los patrones de consumo de tabaco varían según sexo y edad “La franja en nuestros medios mayormente esta entre 18 y 55 años, es mucho más frecuente, en hombres que en mujeres y la mortalidad sigue siendo alta en ambos sexos”.
  
Manifiesta que el tabaquismo o la dependencia del tabaco estas asociada mayormente a enfermedades respiratorias como bronquitis crónica, enfisema y aumenta de manera considerable los daños en pacientes asmáticos con hábitos de fumar.
 
 Asegura que estos se producen un remodelado importante, de las vías aéreas, que lo van convirtiendo en pacientes con peor respuesta al uso de broncodilatadores habituales, usados en la terapéutica de esta enfermedad.

Daños:
  
Plutarco Arias señala que se han comprobado daños muy importantes con lo que tiene que ver con mecanismo de defensa del aparato respiratorio en los que se produce importantes daños en el aparato mucociliar.
  
Además en las glándulas mucosas, bronquiales, lo que consecuentemente va a producir  importantes daños de tipo obstructivo en el sistema bronquial, debido a lo cual estos pacientes van a presentar con el tiempo datos de tos y expectoración abundante.
 
También episodios de broncoespasmo (apretamiento), que con el transcurrir de los años van produciendo baja calidad en la función pulmonar, y de hecho, a mayor tiempo con estas sintomatologías, se producirá invalidez desde el punto respiratorio.
   
“Ya que estos pacientes se les dificultara la realización de actividades físicas propias que pueden hacer personas con su misma edad”, subraya.
  
Arias dice que igualmente, esos daños respiratorios a largo plazo que han disminuido las defensas propias del sistema respiratorio, el cual al igual que la piel, es el único expuesto al medio ambiente, pero con la condición de que no resiste las agresiones del medio externo.
 
“Condicionan de manera considerable problema de tipo infeccioso como la neumonía, bronconeumonía, en vista de que consecuentemente hay daños simultáneos que se producen en el parénquima pulmonar donde están representados los alveolos, los cuales producen el intercambio gaseoso de oxigeno hacia la sangre”, subrayó.
  
El neumólogo destaca que debido a esos daños este se verá disminuido en los fumadores sobre todo cuando ya padecen la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, sobre todo la llamada enfisema pulmonar.

TRATAMIENTO PARA DEJAR DE FUMAR:
  
El galeno afirma que dejar de fumar es percibido como una trapada sin salida en el fumador que quiere dejarlo, y debe este sentirse suficientemente motivado para abandonar el tabaco, por lo que dependen mucho en que el paciente reconozca el estadio y el deseo en que se encuentra para dejar de hacerlo.
  
Asegura que en base a esto el médico adoptará la intervención según la base de cambio que se encuentre el individuo, por eso es importante implementar estrategias eficaces que hagan al fumado tomar conciencia de los daños que les van produciendo al pasar los años el hábito tabáquico.
  
Señala que por ellos la intervención del médico debe ir dirigida en una forma mínima, de forma seria, clara, sencilla y personalizada hacia el paciente fumador, lo que puede conseguir un incremento significativo en el grado de abstinencia de los fumadores.
  
Indica que en principio, lo antes expuesto consiste en la fase de preparación del fumador entendiendo que es posible dejar de fumar y que le será fácil conseguirlo con el apoyo de familiares y grupos de amigos.
   
Y convertir esto en una meta individual de motivos primarios para dejar de fumar igualmente que cada individuo reflexiones, cuales son los momentos en donde tiene más posibilidad de fumar, y plantear estrategias para afrontarlo con éxito.
  
Dice que la segunda fase está basada en la fase de abandono, donde se establece una fecha para dejar de fumar, en esta se pueden ayudar con tratamientos farmacológicos adecuados, técnica de control de ansiedad, de manejo de estrés, así como técnicas de relajación.
   
“Esta fase se puede dar el síndrome de abstinencia el cual consiste en irritabilidad, enfado, ansiedad, inquietud, dificultad de concentración, el cual ocurre en las primeras cuatro semanas, seguido de insomnio, pérdida de apetito alrededores de las diez semanas.
   
Una tercera fase consiste en una fase de mantenimiento, la cual se hace imprescindible la necesidad de reconocer los momentos de recaídas y tratar de enfrentarlo con éxito, tratando de afianzar en cada momento ideas positivas y crearse la percepción y la seguridad de que el deseo de fumar se puede controlar.
  
Plutarco Arias señala que en algunos casos existen recaídas y verlo como un accidente previsible, pero retomando de nuevo la idea de que es un hecho que se puede superar y que el abandono del tabaco es posible, para el bienestar de la salud respiratoria.
   
Y de los múltiples daños cardiovasculares, enfermedades coronarias, infartos y los múltiples cáncer en diferentes sistemas del organismo.