Nido para Ángeles estrena su nueva casa; una escuela con atención integral

Nombran a la primera dama, Cándida Montilla, madrina del centro
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SANTO DOMINGO, RD/ DIARIO DE SALUD.-- Sebastián de Jesús tiene su cabeza acomodada en un cojín. Es como un bebé que sonríe casi siempre y da la apariencia de ser un niño feliz que duerme plácidamente.


El hijo de Mónika Despradel y José Antonio Rodríguez fue la inspiración para crear la fundación Nido para Ángeles que ayer inauguraron su nuevo local en un área comprendida en 1,519 metros cuadrados en Arroyo Hondo II, donde ofrecen un programa integral, especializado y multidisciplinario para niños y jóvenes con parálisis cerebral.


Fue en diciembre del 2007 cuando los padres, familiares y amigos de la pareja iniciaron la labor a favor de las personas con parálisis cerebral y que 11 años después cuentan con un amplio local donado por el patronato Dulce Milagro, donde funcionaba la escuela de educación especial, y que la presidenta de la fundación, Despradel, agradece a la primera dama, Cándida Montilla de Medina, y al Ministro de Educación , Andrés Navarro, entre otros funcionarios y empresarios, que contribuyeron para que la obra sea una realidad.


El nuevo local, que empezó a funcionar en agosto del pasado año, pero que se inauguró ayer, plantea una amplia visión para la garantía de los derechos fundamentales de sus alumnos.


“En ese sentido, seguiremos trabajando, a través de nuestros programas integrales, reforzando el pensamiento estratégico de nuestra institución”, dijo Despradel.


Este es el único centro especializado en parálisis cerebral del país que facilita la accesibilidad a los programas de educación, medicina física y rehabilitación.


Durante el acto, la presidenta de la fundación nombró a la Primera Dama, madrina de Nido para Ángeles, por su valiosos aportes al sector infantil con discapacidad del país.


Al responder el gesto, Montilla de Medina dijo que recibía la distinción con mucha humildad. Aprovechó para decir que el Centro de Atención Integral para la Discapacidad (CAID) es un proyecto muy bendecido, sobre todo, porque se hizo de corazón, porque trabajan con el corazón se hace con visión y sensibilidad humana.


Dijo que a través de CAID han salido muchos amigos, se ha apoyado a muchas instituciones, por eso se atreve a afirmar que a través de Nido para Ángeles llegarán grandes bendiciones para su presidenta y para todas las personas que han contribuido a ese proyecto sensible para una sociedad necesitada.

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