La ley de Seguridad Social necesita modificación

Dr. Luis Faringthon Reyes

Presidente del Colegio Médico Santiago

La ley de seguridad social ya cumplió con la aparición viciada de su ejecución, es por eso que al pasar el tiempo nos hemos dado cuenta de que debe ser modificada para el establecimiento real del sistema de seguridad social, con equidad, solidaridad y universalidad, principios establecidos en la ley pero que no encuentran asidero en la ejecución de esta norma.

Los médicos tienen derecho a recibir mejores ingresos por sus servicios, que sean revisados y modificados conforme establece la norma, es necesario que el veto cambie a poder del Estado a quien el mandato constitucional del artículo 61, establece como el responsable de la salud de toda la población, pero vemos necesario la reglamentación clara y no excluyente entre ARS Y PSS (médicos y Clínicas privadas).

La inequidad con la que se manejan las patologías y el plan básico, el cual ha sido un número de una función de una obra llamada “desinterés por el paciente”, deben ser incluidas las patologías frecuentes, aumento del pago por consulta al médico y con ello estaríamos contribuyendo a la economía del paciente, la cobertura por medicamentos se haga acumulativa en los casos que aplique.

Los costos de intermediación con las AFP deben ser revisados, regulados y puestos a la disposición de mejoría a los afiliados del sistema, por lo que deben calcularse la disminución e las ganancias y aumentar los beneficios a todos los pensionados.

La estrategia del primer nivel de atención a nivel público puede ser implementada, tomando en cuenta requisitos que garanticen su permanencia y llevar salud a los más necesitados, aunque considero no es la panacea que muchos quieren venderle a todos, pues en nuestro país su aplicación debe ser iniciada con un plan piloto regional público, establecido en la ley y que se sistematice, la ejecuciones este plan, evaluación continua y corrector de los hallazgos del la implementación.

Debemos vencer los conflictos de intereses, desequilibrios de poder en el sistema dominicano, aunque no es fácil tarea debemos madurar en estos aspectos con el fin de eliminar las distorsiones que tiene la ley 87-01.