"Parches" experimentales de células musculares podrían reparar corazones enfermos

|


REDACCIÓN REUTERS HEALTH - Emparchar el corazón con láminas de células del propio paciente mejoraría los síntomas en algunos casos de insuficiencia cardíaca, de acuerdo con un estudio experimental.


Un equipo de Japón recolectó tejido de los músculos del muslo de un grupo de pacientes para producir láminas de células que, luego, trasplantaron a sus corazones.


El objetivo del estudio era evaluar la seguridad y la viabilidad del procedimiento. Pero el equipo también observó al año de la cirugía que algunos pacientes habían mejorado su capacidad física y función cardíaca.


Ahora, hay que replicar los resultados con otros estudios más grandes, según publica en Journal of the American Heart Association el equipo del doctor Yoshiki Sawa, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Osaka.


Unos 6 millones de estadounidenses padecen insuficiencia cardíaca, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por su sigla en inglés).


Este problema aparece cuando el corazón no bombea suficiente sangre al cuerpo. El tratamiento varía desde una combinación de cambios alimentarios, fármacos y ejercicio hasta cirugía.


En los 27 pacientes del estudio, los tratamientos tradicionales no habían dado resultado. Tenían insuficiencia cardíaca clase II ó III, es decir que sentían cansancio, palpitaciones y falta de aire con las actividades diarias.


Los autores les extrajeron a todos células de una pequeña poción de músculo extraída del muslo. Cultivaron las células, evaluaron las moléculas de señalización que indican la presencia de células madre del músculo esquelético. Luego, hicieron crecer las células de cultivo en láminas delgadas pequeñas.


Tras colocar el parche quirúrgicamente, el quipo mantuvo en observación a los pacientes para detectar complicaciones. Les dieron el alta a los 50 ó 60 días. La cirugía no tuvo complicaciones.


En estudios previos, al inyectar las células madres en el corazón, algunos pacientes desarrollaron una arritmia. En este estudio, tres pacientes tenían arritmia con las láminas celulares, aunque no les ponía en riesgo la vida y, según se comprobó, eran previas a la cirugía.


Al año, el 96 por ciento seguía con vida. A los tres años, seguía vivo el 84 por ciento.


Los participantes con insuficiencia cardíaca por el agrandamiento o debilitamiento de una cámara cardíaca (cardiomiopatía dilatada) no mejoraron tanto después de la cirugía como aquellos con insuficiencia cardíaca por estrechamiento de los vasos sanguíneos (cardiomiopatía isquémica).


Los pacientes con cardiomiopatía isquémica mejoraron, ya que la insuficiencia cardíaca de clase III pasó en un año a ser de clave II. En ese intervalo, el grupo con cardiomiopatía isquémica llegó a caminar 484 metros en la prueba de seis minutos, comparado con 416 metros antes del procedimiento.


Además, esos pacientes mejoraron sus indicadores en el análisis de sangre para determinar cómo funciona el corazón. El equipo no comparó los parches con otros tratamientos, como la cirugía.


FUENTE: Journal of the American Heart Association, online 5 de abril del 2017

Sin comentarios

Escribe tu comentario




No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.